Compresión muscular isquémica MEDECIN ABONNE

La compresión muscular isquémica se utiliza en el tratamiento de los síndromes miofasciales.

Consiste en ejercer una presión sostenida sobre la zona de contractura muscular responsable del síndrome miofascial.

Para aplicar esta técnica, primero se estira el músculo responsable hasta el límite de la incomodidad. Luego aplicamos el pulgar en el área responsable de manera sostenida.
Al mismo tiempo que la molestia tiende a disminuir, se aumenta gradualmente la presión, posiblemente con la ayuda del segundo pulgar. Esta presión se mantiene durante 1 minuto.

Si la contractura persiste, se puede repetir la técnica si es posible después de aplicar calor en la zona.

Esta técnica puede ser practicada por el propio paciente, lo que permite realizarla varias veces al día si es necesario.

También puede utilizar una pelota de tenis para los músculos de difícil acceso para el automasaje.

Dolor cronico